QUIERO QUE ME DEN DE BAJA

Como vivir del cuento a nuestra costa es hoy por hoy una ciencia de las que algunas compañías de telefonía son verdaderos catedrádicos.
En lo últimos tiempos ha vuelto con fuerza la moda de los contratos que, de repente, aparecen nuestro nombre, pero está firmado por otro. El cambio de compañía solicitado por el usuario es una práctica que en el mundo anglosajón se conoce como SLAMMING.
Lunes, 14 de marzo de 2016. Ha vuelto a amenazar a mi tía Mercedes con dejar con sin teléfono por no pagar las facturas. La compañía "MELANMMANGAO" le recuerda una vez más que, con el fin de que sus llamadas dejarán de realizarse a través de telefónica, mi tío Ignacio firmó con ellos un contrato de preasignación. En cuanto llego el primer recibo de MELANMANGO, mi tía les llamó por teléfono para explicarles que alguien en la empresa debía haber cometido un error. Pero ahora le han enviado una carta que advierten que además de cortar la linea incluirán a mi tío en un regístro de morosos si no abona los recibos pendientes. Dentro del sobre hay también una fotocopia de un contrato, firmado hace unos meses, a nombre de Ignacio Bronca Segura. Mi tío falleció en el año 1998.
Las Asociaciones de consumidores han destapado multitud de usuarios han sido victima del secuestro de sus lineas por parte de RETEVISIÓN y en menor medida por alguna otra nueva compañía mediante la manipulación de contratos incluso con la inclusión de firmas falsas, dan de alta a Clientes de Telefónica de preasignación  mediante el que todas sus llamadas son facturadas directamente por el otro operador. Los afectados no solo pagan a una compañía que no desean con las consiguientes diferencias tarifarías, si no que incluso puede estar abonando doblemente las mismas, si tienes contratados determinados planes con Telefónica.
Este fraude masivo, viene ocurriendo desde 2001 cuando la Comisión del Mercado de la comunicación decidió imponer a Telefónica que autorizarse directamente la  práctica total de peticiones de preasignación que recibe -algo parecido a las actuales portabilidades- sin pedir documentos que demostrasen la veracidad de los contratos.
Gracias a la impagable labor de esta asociaciones de consumidores se está logrando que numerosas victimas vuelvan con sus compañías sin pagar nada a sus timadores o recuperando su dinero,denunciando así mismo este fraude masivo ante el Ministerio de Ciencias y Tecnología.
Recientemente el Servicio de defensa de loa competencia, sin embargo, y para sorpresa de todos dio carpetazo a una denuncia de Telefónica con la excusa de que "no afecta al interés publico" porque las victimas no tardan más de dos meses en percartarse  de la "supuesta estafa". Por si fuera poco, dice que "al favorecer el acceso al mercado de otros operadores" se reduce el poder de la principal compañía, "quedando favorecida en el mercado". Esperemos que si dentro de unos años las compañías eléctrica copian el fraude, quien gobierne no actúe con la misma desfachatez.