viernes, 18 de marzo de 2016

                                                                LOS TIEMPOS DE LA JUSTICIA
El auto de la jueza Núñez Bolaño confirmando la tesis de la Fiscalia Anticorrupción  de la prescrición
 de los delito de doce de las empresas investigada en la Sierra Norte de Sevilla dentro de la causa de los ERE irregulares no hace más que confirmar que los tiempos de la Justicia no están acorde con la expectativa de una sociedad cada vez más sensibilidad con los abusos de los fondos públicos. En  complejidad, se unen este caso, que nadie duda que es de especial complejidad, se unen múltiples razones que han provocado, como ocurre en otros similares, la prescripción de los delitos. En primer
lugar, los propios recursos de las administración de Justicia, escasos, a veces obsoleto y a todas luces
insuficientes para afrontar una instrucción  de estas características. A esta escasez de recurso se une la propia instrucción de la jueza Mercedes Alaya, que, empeñada en delimitar la "cúspide" de la pirámide de los ERE, ha perdido tiempo y recurso en "atar" a esos empresarios que se aprovecharon de un sistema irregular que campaba a sus anchas. En la parte contraria, destacable y hasta reprobable en algunos casos ha sido la actitud de la Junta de Andalucía -y también de otras administraciones publicas- a la hora de aportar la documentación , que si bien parte de la culpa podría achacarse al propio descontrol existente en cada uno de los departamentos implicados en las investigaciones, no es
menos cierto que la celeridad no ha sido fuerte, aunque hubiera avisado de las posibles prescripción de los delitos. Y en éstos últimos sólo queda agarrarse a la única posibilidad de recuperar los fondos:
la responsabilidad civil.

No hay comentarios:

Publicar un comentario