EL "NEGOCIO DEL SIGLO": LOS CURSOS
Los cursos fueron un pingúe beneficio para la CEA, UGT Y CCOO, Firmantes de la concentración que avalaba la política económica de la Junta de Andalucía.
El testigo protegido por la jueza Alaya en la investigación  sobre los cursos de formación  de la Junta, Teodoro Montes, ha prestado un testimonio demoledor ante la comisión del Parlamento andaluz y resumiendo la cuestión  en una frase impactante: "el negocio del siglo en la Junta en un periodo amplio ha sido la formación". Montes ha sido jefe de gestión de Formación Profesional Ocupacional y funcionario del Gobierno andaluz dedicado a la formación desde hace 20 años, por lo que conoce a fondo los entresijos de unos cursos que, según ha dicho, constituyeron un pigúe beneficio para la patronal, la CEA y los dos sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO, casualmente los firmantes de los acuerdos de concertación que avalaban la política económica de la Junta de Andalucia. los agentes sociales que pactaban con la Junta han obtenido, conforme a este testimonio, un trato de favor en la concesión de cursos, mediante un convenio al margen de la normativa vigente, sin sedes dignas donde impartirlos y haciendo con la convivencia de la Junta, literalmente lo que le venia en gana, como presentar decenas de propuestas un día ante de finalizar el plazo u ofrecer homologaciones  inadecuada. Montes ha dibujado un escenario en que la Junta estaba siempre dispuesta a facilitar el negocio de la formación  en vez de controlarla porque así se beneficiaba  en términos políticos de influencia, relaciones y "de todo". El testigo protegido ha dejado la impresión  que los cursos fueron el modo que la Junta premio a quienes le garantizaban la paz social con los acuerdos de concertación.