Me sorprende las contradicciones sociales que se dan en lo que se supone normas o leyes y el conocimiento que se da a la población ce cuándo o dónde infrigiria. Por ejemplo, si se limita la velocidad y ademas de la concienciación social están las multas a los que la rebasan ¿como de venden aparatos avisadores de radares? Otra, mucho peor, es la del juego permisivo a traves de la red.
Hace dos años un chiquillo de mi clase dijo que había ganado dos mil euros esa noche con la televisión. Que estaba estaba tan emocionado que casi no había pegado ojo.
-Buena feria te vas a tirar entonces ¿no?
-No señor, el dinero se queda en fondo para cuando quiera mi padre jugar otra vez.
Sin querer ser cruel me limite a decirle: -Anda que no son "espabilado" los de la tele. Seguro que si tu padre hubiese perdido, les tiene que dar el dinero rápido...Se a quién beneficia la ONCE. Compro cupones porque hay una importantísima labor social detrás de ellos. Sé ha quien beneficia la lotería
La promesa del dinero fácil conseguido sin trabajar, presentado como el remedio a las penas a las personas con penas a las personas con problemas de autoestima y ansiedad en el cebo donde picarán y se arruinarán ¿Como se puede consentir esto? Me temo que hay poca conciencia aunque esta la libertad de saber elegir.
No se quien gana, o quien es el responsable, pero es un tema que me preocupa muchísimo´Es fácil acceso de niño, adolescente y jóvenes a estas redes , me hacen pensar que estamos en el camino equivocado. ¿Sabemos cuantos niños disponen de televisión en su dormitorio? ¿Podemos garantizar que desde sus móviles no padecerán una dependencia al juego? Los padres tienen el deber de controlar qué aprenden.
¿A quien beneficia esto?
¿Pondremos remedios ante que nos toque lamentarlos? Me preocupa que nos dejemos colar goles con los brazos cruzados.
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