DISEÑO HACIA LOS GENIOS
España, Andalucía y por extensión Cadiz sufren históricamente un mal endémico y, visto lo visto, hereditario. Desdeñamos a nuestros genios. Lo tratamos con desdén. De vez en cuando nos acordamos de ellos, sobre todo para conmemorar su muerte o su nacimiento. O para poner su nombre en algún galardón, a un colegio o en alguna fundación. Poco más. Se hace más evidente este

hecho si nos comparamos con otros países, por ejemplo Inglaterra o Francia o Alemania. Nada que ver el partido que le sacan a Shakespeare con lo que nosotros le sacamos a Cervantes. Aquí reformar
la casa del genio de las letras ha sido y es una odisea. Y eso sin hablar de otros grandes genios a los que el ninguneo llega a cuotas inimaginables. Véase que ni siquiera nos hemos preocupado en buscar dónde está el cuerpo sin vida de Federico Garcia Lorca  en cualquier otro país se hubiera levantado cada palmo de la tierra hasta dar con el. Pero esto es España, que daría un espartano mientras lanza una patada al pecho de las administraciones pública. Ayer se conmemoró en Cadiz
el 140 aniversario del nacimiento del compositor Manuel de Falla. Ni que decir cabe que el correo
de este medio está repleto de convocatorias a actos del Ayuntamiento que como es normal, se ha volcado con tal efeméride. Es ironía. Poquita muy poquita atención le ha prestado el Ayuntamiento al genial músico gaditano. Parece quererle mas en Granada, aunque nos duela decirlo. Poquísima presencia municipal en los actos de homenaje a uno de sus ciudadanos más insigne. Pero en fin, si hubieran hecho lo contrario, esto sería Cadiz esto no seria Andalucía, esto no seria España.