PASITO A PASO

Poco  a poco, con las prisas justas y obligados por la necesidad imperiosa de una sociedad que empieza a adolecer de ideas de ideas esclarecedoras, y que sirven de revulsivo para salir de una situación más que critica, van caminando las confluencias de cara a una nueva cita electoral. 
La unión  de los partidos de izquierda y progreso abre un horizonte de posibilidades, y eso se nota
en las opiniones y editoriales de los grandes medios de comunicación, más preocupados por el devenir de sus influyentes patrocinadores,  que del futuro del país. Empiezan a salir encuestas, muchas de ellas tendenciosas y que fijan sus números  para intentar demostrar una sociedad estanca, que está hastiada y sin ganas de elecciones ya se sabe que de tanto repetir que estamos aburridos de la política, al final hay quien se lo acaba creyendo y no ejerce su derecho al voto.
Y es eso precisamente lo que beneficia a la derecha española, siempre se ha dicho, todos han coincidido y han dado por hecho que el votante del PP es fiel a su marca y no falla en una cita electoral, ejerciendo muy poca autocrítica  de la gestión realizada por los suyos. Si bien es cierto empiezan a salir voces en el PP que reclaman un cambio de rumbo, un giro hartos de tanta corrupción y cansados del discurso de sus lideres sobre los casos aislado que ya suman más de 55 y
más de 500 imputados. No creo que dejen de votar a su partido esa es la verdad, pero también es cierto, que se produce un hecho hasta ahora desconocido, al menos públicamente, y es fácil leer a muchos militantes del PP manifestarse en las redes sociales y mostrar su descontento. Por ahora,

nos hacen creer que las elecciones del 26 de junio van a arrojar resultados similares a los anteriores, hasta el CIS se ha apresurado a publicarlo, sin tener muy claro aún como va a quedar la confluencia de Podemos e IU todas las confluencias territoriales de izquierdas. Tenemos por delante un mes y veinte días  de especulaciones, de enfrentamientos nimios por debate, por gastos de campaña, por quién va a pactar con quién, un entretenimiento usual en las previas, porque además todos dan por hecho que los votantes conocen sus programas, porque van a ser los mismos que hace cuatro meses. En definitiva, ahora toca aguantar criticas de uno a otros, de escuchar mucho Venezuela, mucho ETA, mucho Otegui, mucho que Podemos va a fagocitar a IU y así un largo de etcéteras. Prepárense que no nos libra nadie de tener redes sociales a los "trolls" de unos y de otros.