RITA SE DA LA VUELTA
No sabe si la senadora Rita Barbará se convertirá en Rita "La cantaora", en un momento de canloret, sobre lo que conoce del PP-especialmente en el país valenciano o sencillamente se ajustara
al guion y actuara con la obediencia que se le pide desde su partido de toda la vida y, para no dificultar una posible nueva investidura de Mariano Rajoy, se marcha a su casa abandonando su casa abandonando la política.
Al conocerse que el Tribunal Supremo la iba a investigar hubo un amago de esa vuelta a casa. Salió mañanera en dirección al Senado para participar en la constitución de las comisiones y, al enterarse del auto, volvió desde Cuenca a su domicilio a estudiar el auto y a no ser fotografiada en los pasillos
de la antigua sede d Consejo Nacional de Movimiento donde sus componentes iban con camisa azul y chaquetilla blanca los días solemne, aunque antes en la monarquia había tenido un titulo más rimbombante-Estamento de los próceres del Reino-.Veremosque tiempo tarde Rajoy en exigirle a Barberá que no seas prócer de nada, ni del Senado ni del PP. El llamado pitufeo o blanqueo de dinero al por menor, utilizando a decenas de personas le puede costar caro. O no.
Memoria o desmemoria Componenda y arreglo. barcena ya no acusa al PP de los martillazos sobre sus ordenadores. No tiene dinero para seguir la causa-dice-y todos los creemos y aquí paz y allí impunidad y gloria, aunque las acusaciones particulares sostienen que la continuarán a pesar del incidente sobrevenido-en diferido.
El ex presidente balear Jaume Matas ya esta también arreglando sus problemas en una oportunidad que no desaprovechara. O cárcel o confiesa los tremanejes que contenían los sobres que iban y venían de Génova a Mallorca. Nada importante solo contenían las instrucciones de uso para las correspondientes adjudicaciones a los fervorosos donante que hacían que en las elecciones populares siempre manara leche y miel en lugar de la maldita escasez y austeridad que era en las normas en el país de los recortes.
Todos eran sus amigos, reconocido y jaleado en público en numerosos mitines y en privado sé fu, ¿erte, Luis. Pero él ya no los conoce, ¿verdad Mariano.
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