En estos días se esta celebrando la Paraolimpiads en Río de Janerio con unos enormes resultados para todos los participantes por aquello de su esfuerzo de que supone de estos deportistas participar en este evento.
No solo por as evidentes trabas físicas que muchos tienen sino que que también hay grandes inconvenientes desde el punto de vista del patrocinio ce deportistas de sensibilidad hacia lo que hacen
No es fácil el camino que tienen que recorrer estos deportistas durante estos cuatros años para poder conseguir la gloria olímpica en cada una de las disciplinas. Uno de los temas que más llama la atención es la falta de cobertura por parte de la sociedad en general de esta actividad deportiva. Hemos tenido medallas de los deportistas nacionales o extranjero hasta en la sopa en las olimpiadas pero, cuando llegan las Paraolimpíadas nos encontramos que cuesta tener un conocimiento en tiempo real de los logros deportivos de los españoles. Es como si no existieran o como su actividad fuera menor cuando precisamente pasa lo contrario, tiene un mayor merito si cabe por el tiempo y el esfuerzo invertido en poder competir. de este evento
Fijense en esto que le digo y que tiene su traslado al conjunto de actividades que están alrededor de la celebración de este evento. Hace cuatro años por esta fecha estaba en Londres por motivos vacacionales. Una de las cosas que más me llamo la atención fue la falta de sensibilidad en el transporte público en el año en el que se estaba celebrando un evento de este tipo. Muchas de las estaciones del metro no estaban adaptadas a personas con discapacidad, solo algunas. Esto es intolerable y sucedía sin que nadie le pusiera remedio o solución.
Desde hace tiempo he mantenido la opinión de que las principales barreras con las que se enfrentan las personas con discapacidad son las barreras mentales, mucho mas difíciles de superar que las barreras arquitectónicas. Por eso todavía hay edificios públicos que tienen problemas de accesibilidad y no hay una concienciación social importante sobre este importante asunto que atenta contra la igualdad de un ciudadano con otros.
Por todo ello, vuelvo a realizar , desde esta modesta columna de opinión en este periódico, un llamamiento para que se tome conciencia de este tipo de situaciones que se apueste por el deporte en su conjunto y en todas las modalidades, olímpica o paraolímpicas. Cada medalla de uno de estos deportistas o su simple participación es un ejemplo a seguir por partes de todos y para valorar por todos.
Esperemos que así sea y dentro de cuatro años no vuelva a escribirles de lo mismo
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