martes, 13 de octubre de 2015

JOSÉ MARIA PEMÁN Y PEMARTÍN

Por fin. La Asociación Católica de Propagandistas organizo el pasado miércoles en Jerez, un justo homenaje a José Maria Pemán y Pemartín (Cádiz, 1898-1981). El insigne escritor ha brillado con luz propia como dramaturgo, poeta, orador, novelista, académico y, durante varios años, director de la Real Academia Española, a la que perteneció desde 1936. Debo decir ante que nada que fui un lector, adolescente y entusiasta de José Maria Pemán.
El insigne gaditano y jerezano de autoadopción fue, durante toda su vida, portavoz de nuestra provincia en todo el mundo entero de escritores andaluces.
Como poeta se ha distinguido para seguir los valores innumerable de la tradición con "Las Musas y las horas" antología poética de su producción lírica, y por tener su música honda y lenta, su melancolia efusiva y su pasaje andaluz. De la vida sencilla. A la rueda, rueda. El barrio de Santa Cruz, Elegia de la tradición de España, Señorita del mar y Poema de la bestia y del ángel, fueron otras tantas obras del gran lírico pero fue en el teatro el genero que mas se ha destacado. Triunfo con su trilogía El divino impaciente. Cuando las Cortes de Cádiz y Cisneros. Otras obras son: 
La hidalga limonera, La casa Vendimia, Callados como muerto y Todo amor. Escribió en colaboración con José Maria Segarra en prosa, La herida luminosa. que obtuvo una gran acogida por parte del publico.
Como orador, descuella por su estilo quizá algo decinónico, florida elocuencia y un espíritu combativo  que pugna  a favor de su idea de la Hispanidad. Pero su oratoria ha sido muy aplaudida en América donde dio una serie de conferencias.
Como columnista escribió hasta su muerte tres artículos a la semana para ABC, alcanzado  una gran audiencia popular. como cristiano, fue un católico sin fisura, de arraigadas convicciones de gran fervor patriótico poniendo gran parte de su indudable facilidad literaria al servicio de sus ideas, sobre todo en el teatro y en la oratoria. No olvidare nunca la impresión  que me causo  oír  el discurso que pronuncio en el Congreso Eucarístico de Sevilla.
La multitud lo interrumpió varias veces sus altas cotas de oratorias y en su profunda fe a la custodia y la Eucaristía.
No obstante, los políticos ha intentado escurecer su figura literaria con un perfil que no pretendió nunca. eso se pierden.


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