martes, 27 de octubre de 2015

A LAS TRES SON LAS DOS, Mcfly

Ya está aquí el cambio de hora. Tenia que llegar, que llevamos un mes y medio diciendo y oyendo esa frase mítica de "ya se notan las tardes" de cuando no se tiene tema de conversación . Ya es oficialmente invierno, se te echa las noches encima, no te da tiempo de nada y llega la horripilante tarea del cambio de armario. Los niños se quedan fritos antes y puede ver el telediario, eso si, pero da igual, porque te cuesta la misma vida levantarlos entre semana, pero el sábados y domingos, que es cuando dicen a ver si hay suerte, se levantan a las 7,30, con cambio de hora o sin ella. Eso es ley de vida.
Lo del cambio de hora fue un invento de Franco en 1942 , y a continuado con todos los gobiernos. Así nos regimos por la hora de Europa Central, en lugar de la de por Greenwich que por cercanía es la que mejor nos iría, y estaríamos con el mismo horario de Canarias, Portugal, Francia, o Reino Unido. Fuera de occidente, solo cambia sus horas como hacemos aquí en Irán y Mongolia, si. Hagan sus comentarios mentalmente.
La justificación del cambio de hora es porque se ahorra energía. Que digo yo que la energía que se ahorra debe ser bde tipo personal, porque de la otra no se yo. Coge tu ultima factura de la luz y te se caen dos lagrimas tipo Candy Candy. y de dos meses el ahorro de energía se nos va a ir llorando igual, no creáis.
Que no. Decididamente no se ahorra energía de la que nos cuesta dinero. Si no hicieran un cambio de horario en condiciones para ahorrar energía - de la que viene en una factura  tendría que ser un
cambio sin medias tintas. Una cosa radical. Así que nada de una horita de porqueria: ocho horas para atrás del tirón. Ademas de tener mas ojeras que  Quique San Francisco y un jet de pobres, nos podriamos acoger a las horas donde el consumo energético es menor.
En lugar de poner la lavadora a las 3 de la mañana, como hay que hacerlo ahora por ser la hora mas barata, a las 3 de la mañana serian a las 9 de la noche. Batallando con tus hijos todavía, haciendo cena y ademas poniendo la lavadora. Pero claro, entonces la energía que también te va a pasar factura es la tuya, haciendo todo eso mientra te adapta. Nada. Este cambio efectivamente no funcionaría.
Pienso todo esto al hilo del fenómeno de Regreso al Futuro de esta última semana, que ha llenado telediarios, las paginas del periódico, el time line de tu facebook, hasta el punto de hacerte soñar, quien lo diría, la foto de niños enfermos pidiéndote un like.
Nos hemos puestos a elucubrar qué pasaría si tuviéramos un DeLorean, y pudiéramos meter primera, segunda, tercera... y plantarnos en la fecha que quisiéramos. Cuántas cosas evitaríamos .
Porque el futuro más o menos da igual. Al menos a mi no me gustaría saber la fecha de mi muerte, así que de ir hacia el futuro yo al menos paso. Yo me iría hacia atrás (sin Franco por supuesto). Para irte a esas fechas que todos sabemos, y que pasan de evitar catástrofes (todos somos buenas personas) a arreglar debacles personales. Aunque estaría bien viajar una mijita para adelante, digamos, para saber el resultado del Euromillón. Todos lo haríamos, no digáis que no. Que todos
somos buenos pero no idiotas.
Lo de regresar al futuro, o al pasado, es imposible, aunque a veces te invada un sentimiento de dejarte determinadas noticias y situaciones. Pero no os pongáis tristes y seamos optimistas.
Tenemos el cambio de hora, que altera un poco nuestra rutina del Día de la Marmota, porque aunque no te libres el día con un poco de más cansancio de lo habitual porque te han regalado 60 minutos.
El cambio de hora es un DeLorean para tiesos. Una horita para atrás a finales de octubre y una horita para adelante a finales de marzo. Dos veces al año nos dejan poner en ralentí al McFly, aunque lloremos como muñecos manga viendo la factura de la luz dentro de menos de dos meses nos despertaremos diariamente como Bill Murray.

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