La conocida expresión antaño utilizada por bandoleros y asaltante de caminos "la bolsa o la vida" se adapta como anillo al dedo a una gran problemática de nuestro tiempo: el uso indescriminado de bolsas de plasticos y su nefasta consecuencias para la vida marina.
En efecto, por desgracia, una parte de los miles de millones de bolsas de plasticos producida a nivel mundial acaban irremediablemente invadiendo los fragiles ecosistema marinos, destruyendo multiples especies (tortugas, cetáceos, albatros..) que confunde el residuo plastico con alimentos y por ende integrándose peligrosamente en una cadena de la que nosotros somos también un eslabón.
Por tanto, si ama la vida, sé consecuente: rehúsa las bolsas de plastico que te ofrescan, pues su huso indescriminado constituye ciertamente una amenaza para la propia vida.
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