jueves, 10 de septiembre de 2015

A GOLPE DE FOTO

Como siempre pasa en esta sociedad, tiene que venir una foto dramática para revolver las conciencias y se ponga en evidencia la magnitud de loas tragedias que día a día minimizamos con una
insensibilidad que limita con la inhumanidad. Hace muchos años, casi doce años, el debate se centro en la fotografía de los cadáveres descompuestos que el mar había arrojado a las playas de Rota para que se tomara conciencia de la tragedia que sufrían los inmigrantes en su travesía hacia tierras prometidas europea. Hoy es la de un niño muerto también arrojado a la playa por el mar, la que pone en evidencia que el drama de los refugiados es algo mas que un simple problema de cuotas de acogida mientras un primer ministro europeo directamente pone la religión como elemento diferenciador  de las personas. ¿Qué mas da si es religión , si son las costumbres o simplemente el hambre? Europa como otras zonas del mundo que se llama así misma civilizada - es incapaz de abordar un problema humanitario desde ese punto de vista y el de la humanidad. Cuando se produce una movilización  de ese calibre, ya sea por hambre o por guerra, hay que abordar la situación  de una manera integral y no criminalizando a personas desamparadas, con actitudes que recuerdan a regímenes de los que nadie de los que nadie quieren hablar pero que todos tenemos en la mente y con acciones que provocan más deshumanización aún de la que refleja la fotografía del pequeño. Siria está en guerra, en una guerra fraticida, y como en otras regiones delo mundo, la actuación internacional se limita o la condena sin fuerza o la intervención militar sin conciencia provocando casi su eternización.
Como en otras tragedias humanitaria, la gente de a pie, la sociedad, le esta dando un ejemplo de humanidad a los que les gobiernan. Que en un país nórdico haya 14.000 familias dispuestas a acoger en su seno a los refugiados dice mucho de hasta qué punto los ciudadanos son capaces de ser sociales antes que nacionales. Y también dice mucho que países que han sufrido la sangría de la emigración sean ahora incapaces de, por lo menos, tratar con un mínimo de dignidad a los que huyen por necesidad, recomendándoles que se queden en fronteras de nadie. Será para que no hayas mas fotos.

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