RITA Y FIDEL

Fidel, Rita: la vida que Dios nos da ,nadie nos la quita. Por ello, ni peregrinaciones laicista, ni manifestaciones ni concentraciones. Ni desfiles-caravanas militares-fúnebre con resto o cenizas, desde La Habana Santiago de Cuba...Tampoco celebraciones festivas, , ni brinde y jolgorios jubilosos, en Pequeña Habana o Miami.
Y afirmaba Foxá -"los minutos de silencio son "la caravana vacía de la oración" que se ha quedado sin su meollo, sin su dulce amado centro que es Dios" Toda la ignomonia que ha rodeado la muerte de Rita Barberá, empezando por ese grotesco minuto de silencio que le dedicaron (o se negaron a dedicarle) quien antes les habían empujado a la muerte se explica porque España (¿también Cuba?) es una cáscara vacia que se ha quedado sin Dios.
Sin Dios, sin fe. O sea, ni grito, ni silencio.
Ni uno, ni cinco, ni diez minutos. Padrenuestro.