MANIPULACIÓN DEL 28-F

Pablo Iglesias manipuló el sentido del referéndum andaluz del 28 de febrero con el fin de justificar su apoyo al "derecho de decidir" de los catalanes´

Pablo Iglesias al que parte de los medios y las redes sociales dan como vencedor en el debate electoral cuatro, es profesor universitario, ha sido eurodiputado y ha colaborado con la Fundación  Centro de Estudios Político y Sociales. Pese a ese bagaje intelectual, cometió dos errores y realizo una manipulación del referéndum andaluz del 28 de febrero del 1980. Iglesias no supo pronunciar en ingles el nombre de la consultora internacional Price Water House Cooper y la transformo en una 
sui generis House Water Watch Cooper, denominación que ha provocado todo tipo de "memes" en las redes sociales y que al igual que el "relaxing cup of café con leche" de Ana Botella demuestra nuestra generalizado desconocimiento de idiomas. Salvo Calvo Sotelo ningunos de nuestros presidentes han podido superarse en inglés. El lider de Podemos erró al datar en 1977 en vez de en 1980 el referéndum del 28 de febrero en Andalucía. Donde el error se transformó manipulación fue cuando para apoyar su tesis sobre la supuesta necesidad de un referéndum en Cataluña en aras de un pretendido derecho a decidir, presento el 28-F como una consulta soberanista en que los andaluces decidieron  seguir unidos a España en vez de separarse. Los andaluces, cuyos sentimientos españoles es innegable, no pretendieron  jamás la independencia, si no la igualdad de derecho con el resto de compatriotas, para que no hubiera Autonomía de primera y de segunda clase, como querían vascos y catalanes. Al invertir el sentido del 28-F Iglesias ha pretendido sencillamente dar una coartada a los separatistas de cataluña.