UN DISCURSO NUEVO EN EL PP

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, aprovecho hace unos dias un debate parlamentario para lanzar una diatriba contra Andalucia al presentar sólo sus aspectos negativos y atribuirlos  al gobierno regional: caso ERE (nada dijo de la trama Gúrtel del PP ni de Barcenas), paro y fracaso escolar (como si no existierán en el resto de España). Seguia asi la senda continuada por el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, quien dijo que la Transicion democratica no se completaria hasta que el PP no gobernase en Andaucia. Proyectaba asi la idea de que los gobiernos del PSOE no han sido fruto de la desición soberana de los analuces. Por todo éso, sorprende muy positivamente que el nuevo lider del PP (A), Juan Manuel Moreno Bonilla, haya declarado ahora que si no hay alternancia politica en Andalucia, el problema es del PP y no puede imputarse (faltaria más) a los andaluces. Por fin un lider del PP se deja de coartadas como el voto cautivo y el regimen clientelar para asumir su propia responsabilidad y reconocer que su partido a fallado a la hora de conectar con los andaluces, no ha sido permeable a ciertos sectores sociales o no ha sabido escuchar a la sociedad. La primera condición para cambiar la realidad es aceptarla. El PP la negaba. Moreno Bonilla ha tenido la humildad, al tiempo que la grandeza, de hacerlo, con lo cual él también instaura un nuevo tiempo en la oposición politica andaluza.