Puerto Real en su Laberinto

El primer alcalde puertorrealeño del siglo XX, ell gaditano Francisco Segovia Gutierrez, según fue elegido, sus palabras como tal fueron: "defenderé a ultranza  los intereses de Puerto Real frente a San Fernando ante la posible segregación  de la Carraca e isla Verde pero ante todo, es urgente acabar con la deuda que atenaza a la Hacienda Pública". Lo segundo lo consiguió en su siguiente mandato entre el 16 de enero de 1903 y agosto de 1905.
Durante el tercer gobierno de don  Juan Diego Gómez el cual se inicio en 1918 , se cerro el presupuesto municipal con un desfase entre gastos e ingresos de menos de  57.000 pesetas, cosa que vuelve a suceder en 1920 en que el déficit se eleva a menos 65.000 pesetas.

Don Francisco Rotllán Molina, alcalde entre diciembre de1922 octubre 1923, se encuentra con la comisión de Hacienda emite un informe de la liquidación  que ha sido practicada por la Subsecretaria del Ministerio del ramo en la que figura Puerto Real con un débito al Estado de 321.728 pesetas  y don José Manuel  Derqui Lozano, alcalde durante la "Dictablanda"  del general Berenguer , 1931, al acceder al cargo  hace uso de la palabra para dar cuenta de las gestiones realizada con el presidente del Banco de Crédito Local de España para ver la forma y modo de poder mejorar las condiciones de pago del empréstito realizado  al ayuntamiento, bien con extensión de los plazos de 50 años concertados, ya con disminución de intereses, dado que el prestamo en cuestión  tiene colapsada la Hacienda local.
Para no ser prolijo debemos avanzar hasta el año 1995 en el que accede al cargo de alcalde Antonio Carrión  López, tras 16 años de gobierno del señor Barroso Toledo encarga una auditoria a la prestigiosa firma Arrthur Andersen cuyo resultado sobre pasa los cálculos más pesimistas  ya que la deuda alcanza los 9.300 millones de pesetas algo mas de cuatro veces el presupuesto anual previsto, con el agravante  de que 7.000 millones son deuda a corto plazo.
Esta claro que a lo largo de la historia reciente el Ayuntamiento puertorrealeño ha sido deficitario. No vamos a entrar en el baile de números aportados por el partido gobernante durante los últimos 16 años, IU y PA donde al parecer la deuda alcanza algo más de 120 millones de euros, dando lugar esto a la intervención del Ministerio de Hacienda, hasta  tal punto, que según tengo entendido, las banderas no ondean en los mástiles del ayuntamiento por no poderse comprar tres de ellas y la revista Matagorda con un costo aproximadamente 600 euros, no se puede salir a la calle.
Pero con todo recientemente nos hemos encontrados con el esperpento  que la concejala de la cuestión  pública relacionada con la limpieza, propone un acuerdo a un pastor para que sus cabras limpien de malas hiervas los solares del pueblo por no tener personal suficiente para realizar tales labores. Creo que la actual Corporación ha tocado fondo en cuanto a no poder resolver los problemas inmediatos, que para más inri no ha sido creados por ellos, por lo que pienso es necesario levantar la voz ante tanta inutilidad institucional.