ATENTADO TERRORISTA
Terror en Estambul: La fiesta de Año Nuevo acaba en tragedia
- Las últimas cifras oficiales hablan de 39 muertos, entre ellos 16 extranjeros, y otros 69 heridos en una discoteca. El atacante sigue huido y está en curso una operación policial de búsqueda y captura.
Traslado de los heridos.
El Año Nuevo comenzó en Estambul de la misma y amarga manera que había terminado 2016: marcado por el terror y la muerte. Centenares de personas se disponían a celebrar la noche de San Silvestre en el club Reina del barrio de moda Ortaköy, situado a orillas del Bósforo y uno de los más grandes y afamados de la metrópolis turca. Pero en torno a la 1:15, la fiesta se tornó en masacre.
La agencia de noticias DHA difundió la grabación de una cámara de vigilancia situada frente a la discoteca en la que se ve cómo desde el flanco izquierdo alguien dispara. Algunas balas impactan de rebote en la transitada calle. Un hombre se tambalea hasta caer al suelo, seguramente alcanzado por un disparo. Después, el agresor corre hacia la entrada del Reina y desaparece en su interior.
En las imágenes resulta difícil distinguir al atacante, que parece vestido de negro. En un principio, DHA habla de dos agresores disfrazados de Papá Noel, pero después el ministro del Interior, Süleyman Soylu, señaló que al parecer fue solo un hombre. En la grabación, no obstante, no se aprecia la vestimenta de Santa Claus.
También una testigo citada por el diario "Hürriyet" afirmaba haber visto a "dos hombres armados". "De pronto, la gente comenzó a correr. Mi marido me dijo que no debía tener miedo y saltó sobre mí. La gente corría por encima de mí. Mi marido recibió disparos en tres partes del cuerpo". Después, las fuerzas de seguridad entraron en la discoteca, en la que todo estaba hecho añicos. "Fue horrible".
Dos horas más tarde, cuando aún se hablaba sólo de heridos, el gobernador de Estambul, Vasip Sahin, comparece ante los medios de comunicación en Ortaköy. Sus palabras generan un auténtico shock en la nación: "Es un ataque terrorista". Las últimas cifras oficiales hablan de al menos 39 muertos. Apenas tres semanas antes, la ciudad se había visto sacudida por la última gran masacre del año, en la que murieron más de 40 personas junto al estadio de fútbol del Besiktas.
Estambul había dispuesto un gran despliegue policíal para la noche de fin de año con el objetivo de evitar ataques. Según los medios, había unos 17.000 agentes. Sin embargo, las medidas de seguridad estaban concentradas en la plaza Taksim y la avenida Istiklal Caddesi, una popular zona de ocio nocturno. Taksin había sido cerrada al tráfico y a la entrada de Istiklal Caddesi la policía controlaba los bolsos de la gente.
El sábado, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, había hecho alusión a los muchos atentados terroristas de los últimos 12 meses en su mensaje de Año Nuevo. Según declaró, lamentablemente 2016 había sido un año en el que se sucedieron un terrible acontecimiento tras otro. No obstante, comenzó su discurso con optimismo: "Dejamos 2016 atrás y entramos en 2017 con nuevas esperanzas y expectativas".
No hay comentarios:
Publicar un comentario