Nunca antes había conocido un caso con tantas ramificaciones y con la cuantía manejada en la contratación de obras y servicios públicos. La trama Gurtel-Bárcenas es la historia-clamaron los parlamentarios en el reciente debate-de la financiación del PP. No era la historia solo de unos pillos tesoreros que todos terminaban ricos, sino la dolorosa de un partido que se apartaba de la legalidad para ensobrar sus cercanías.
La implicación del tesorero Bárcenas dejaba claro para la opinión publica - los jueces ya lo empieza a escribir las instrucciones - que un entramado institucional y con el respaldo de la dirección del PP.
No en vano han estado apoyando hasta que ha sido políticamente posible al principal de los los imputados. "Aguanta, sé fuerte Luis" le escribió el ministro presidente del Gobierno y transcribirlo le ha costado al anterior director de EL MUNDO su puesto ben el periódico.
Es la misma historia de los tesoreros anteriores Sanchís y Naseiro que salieron mas que ricos libres de la Justicia por un error en las escuchas (era aquella famosa en la que se oyó el resonante "Estoy en política para forrarme"). Veremos si el juez Ruz puede concluir ésta.
En lugar hacer un streep - tease político y pedir perdón, se ha recurrido durante muchisimos meses una serie de medidas inútiles contra la corrupción, publicadas por muchos: 1 Poner la mano en el fuego por el sospechoso. 2 Convocar ruedas de prensa para decir nada. 3 Intentar silbar mirando al cielo mientras los tribunales en una década deciden. 4 Culpar también de eso al Gobierno anterior. 5 Responsabilizar de todo a la verdadera responsable; Una conspiración contra el PP. 6 Suspender de militancia como remedio supremo y creer que así la corrupción no tiene nada que ver con el partido afectado. Y la principal, la más antigua, la más socorrida...7 Que sea la exmujer o el exmarido quien asuma la responsabilidades. Hasta aquí llegó el caso Mato.
Ahora tocan a rebato...¡para regenerarse!.
No en vano han estado apoyando hasta que ha sido políticamente posible al principal de los los imputados. "Aguanta, sé fuerte Luis" le escribió el ministro presidente del Gobierno y transcribirlo le ha costado al anterior director de EL MUNDO su puesto ben el periódico.
Es la misma historia de los tesoreros anteriores Sanchís y Naseiro que salieron mas que ricos libres de la Justicia por un error en las escuchas (era aquella famosa en la que se oyó el resonante "Estoy en política para forrarme"). Veremos si el juez Ruz puede concluir ésta.
En lugar hacer un streep - tease político y pedir perdón, se ha recurrido durante muchisimos meses una serie de medidas inútiles contra la corrupción, publicadas por muchos: 1 Poner la mano en el fuego por el sospechoso. 2 Convocar ruedas de prensa para decir nada. 3 Intentar silbar mirando al cielo mientras los tribunales en una década deciden. 4 Culpar también de eso al Gobierno anterior. 5 Responsabilizar de todo a la verdadera responsable; Una conspiración contra el PP. 6 Suspender de militancia como remedio supremo y creer que así la corrupción no tiene nada que ver con el partido afectado. Y la principal, la más antigua, la más socorrida...7 Que sea la exmujer o el exmarido quien asuma la responsabilidades. Hasta aquí llegó el caso Mato.
Ahora tocan a rebato...¡para regenerarse!.
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