MUERE UNA ÉPOCA

Con la muerte ayer de Miguel Boyer se cierra un capitulo trascendental que tuvo su principal énfasis a principio de los 80, durante la incipiente democracia reinstaurada . Desde su entrada en el gobierno de Felipe Gonzalez el 3 de diciembre del 1982 hasta su salida el 6 de julio de v1985 tras serles denegada la vicepresidencia económica ejecutó reformas cruciales. Su etapa al frente del Ministerio de Economiá , Hacienda y Comercio fue corta, pero intensa. entre las decisiones más destacada de Boyer están, sin duda la expropiación de Rumasa el 23 de febrero de 1983; el conocido como "decreto Boyer" que liberalizó horarios comerciales y la ley de Arrendamiento Urbanos, al transformar losa contratos de alquiler, que hasta entonces podían tener carácter vitalicio, en temporales. También impulsó las medidas que luego desenbocarían  en la reconversión  industrial de mediado de los 80, que afectaron especialmente en la provincia de Cádiz y sus astilleros y que posteriormente le valieron las primeras huelgas al gobierno no felipista. Fue admirado y reprobado por sus reformas, que si bien acabaron con el anquilosamiento económico producto de la autarquia 
franquista  conllevaron que miles de trabajadores se fueran perdiendo su empleo. Con todo Boyer fue un brillante economista. Tenia una amplia y sobresaliente treayectoria profesional, por lo que nunca necesito la política como forma de vida, algo prácticamente insolito hoy en día. Se ha ido un político de los que ya no quedan
                                                 Descansa en paz, MIGUEL.