lunes, 10 de abril de 2017

                                                               NOTARIOS ESCRITORES

Hasta hace poco eran los médicos los profesionales que mas se dedicaban  a la literatura, hasta el punto de que se distinguía entre escritores médicos y médicos escritores, porque los primeros tenian el titulo pero no ejercían la medicina, y los segundos seguían ejerciendo su profesión de medico. De los primeros pueden citarse a Mateo Aleman, Pio Baroja ; de los segundos, a Santiago Ramón y cajal y a Gregorio Marañón, por limitarme a los españoles. Como se dice de los médicos, todos tienen mala letra, pero algunos buena pluma.
Más recientemente, otros titulados también escriben. Por supuesto, los abogados porque siendo tanto los licenciados en Derecho, no podían faltar. Incluso el Consejo General de la Abogacia tiene instituido un premio literario para los colegiados que en una ocasión, ha sido ganado por el jerezano Juan Pedro Cosano. Pero yo voy a referirme a un grupo más reducido de profesionales del Derecho como son los notarios.  En lo que respecta a abogados del Estado, hasta el momento podemos enseñar uno: el auto teatral Joaquin Calvo Sotelo. Pero los abogados y,sobre todos los notarios tenemos una clara ventaja para la literatura, porque mientras que los médicos tienen que leer los prospectos de la medicina, nosotros tenemos para aprender, una de los mejores texto redactados en castellano: el Codigo Civil. me refiero, al que redactó Garcia Goyena en 1889. Para mi con la Celestina es lo mejor que se ha escrito en nuestra lengua.
Con tan buen aprendizaje y con su ingenio el notario Pablo Gutierrez-Alviz nos da una muestra de que se puede ser muy competente notario y un magnífico escritor. Lo demostró en la presentación  de su tercera obra La soldada rusa que recoge los artículos publicados en los diarios del grupo Joly de 2016 a 2017. la presentación tuvo lugar en la Casa de los Pinelos que albergan tres academias Sevillana y entre ellas la de Buenas Letras, que un día dirigiera su padre El cartel del acto era de lujo: el director de la academia, Rafael Valencia. como anfitrión; Jose Joly,presidente del grupo Joly; Braulio Medel, presidente de la fundación Unicaja, y como presentador, el catedrático Olivencia. El único lidiador, Pabloo Gutierrez-Alviz, que con su ingenio deslumbró al respetable, hasta el punto  que me decía Isabel León, presidenta de otra academia sevillana, que nunca se había reído tanto. No tengo espacio más que para darle toda loa razón a Olivencia al decir que su maestro
Joaquin Garriguez  fue el escritor más brillante de los jurista españoles del siglo XX. En ese camino va mi amigo Pablo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario