jueves, 12 de febrero de 2015

LA COPLA QUE ESCUECE.

A menudo vivimos en medio de una ilusión: queremos que cambie lo que nos rodea, que cambie las circunstancia y tenemos la impresión de que, entonce, todo iría mejor". Leo este párrafo de
Jacques Philippe y veo detrás los pasodobles de muchas, muchísimas agrupaciones  cuyas letras van en ese sentido. Viven y cantan por la ilusión (que viene de iluso) de que cambie lo de afuera. Y no se dan cuenta - no le es rentable - que lo que tiene que cambiar son ellos.
Este Carnaval ha habido un echo significativo: la comparsa sevillana que en el Falla ha exaltado lo sevillano.Barriendo pa´ casita dice que tras 30 años viniendo al Carnaval se sienten gaditanos pero son sevillanos y quieren cantarles a Sevilla.
Con calidad técnica y humor han tenido una actitud provocativa, sin duda. El publico les grito, les silbó, les cantó aquello de esto es cai y aquí hay que mamar.
Quizás es que en el Carnaval de Cádiz temas tabúes que no se pueden tocar. Un sevillano no puede elogiar a Sevilla o un madrileño a Madrid. No a un pregonero foráneo. No se puede reconocer que Rajoy nos está sacando de la crisis en la que nos metió Zapatero.
No se puede hablar bien del puente que Teófila nos va a regalar a los gaditanos que se ha construido en plena crisis como símbolo de superación. No se puede decir que por segunda vez el PP nos saca las castañas del fuego y nos devuelve la economía saneada para poder despilfarrar luego otra vez mas.
Gaditano, no pierda tu sencillez que tanto te caracteriza y te ennoblece y te hace amable.
La vis cómica es una fuerza de la naturaleza gaditana, como bien dice Los Gadiritas, y es medio para hacer critica eficaz. Cuando esa critica la hacemos sin humor, es una critica citrica que ni hace gracia ni mella.
Nos jactamos (o jartamos) de decir que Cádiz es la cuna de la libertad pero hay temas que la secuestran. Un Cádiz dicaz - lo que esconde las palabras  que abre las puertas universales de la critica.

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