LA LEVANTERA : "SIN GLUTEN"
Como suscriptor de este Diario desde hace muchos años ahora desde mi casa, quiero dirigirme al gracioso que escribió el pasado 7 de agosto el articulo a modo irónico (la gracia la vamos a dejar para Carnaval, si es que la tiene), al igual que la aclaración inicial con la que empieza el articulo para cubrirse la espalda de lo que escribe a continuación. Creo que hay mas cosas más divertida o pueden serlo y no ironizar con este tema que está a la orden del día, tanto por los que lo son imposición y los que no toman gluten por decisión personal (que son bien poquitos).
A este señor o señora le invito a que se venga conmigo un día a intentar desayunar, comer o cenar en muchos establecimientos de esta ciudad para que vea lo complicado que es comer teniendo una intolerancia al gluten, que en muchos establecimientos los camareros confunde la cerveza sin gluten con las de alcohol, afortunadamente no es en muchos, pero puntualmente me ha sucedido, y si, la cerveza tiene que ser sin gluten, porque yo también al igual que tu tengo derecho a tomarme una cerveza cuando salgo a la calle, que no tengo lepra
Quizás a lo mejor los camareros deberían de estar un poquito más preparados (no generalizo ya que hay grandisimos profesionales de este sector que esta a la orden del día en estos asuntos), pero es cierto que en muchos sitios ponen de camarero a cualquiera, que ya le digo cuando les dice lo de los alérginos dice "Eso que es" la carta de muñequitos olérgenos es una obligación que los clientes conozcan lo que comen y de que está compuesto cada plato. Es una obligación del establecimiento marchar lar las comandas con las aclaraciones siempre que seas posible a petición del cliente, ya que decide sentarse en su establecimiento y no en otro. En esta ciudad vivimos del turismo e intentar cocinar un poco más sano no debería ser un privilegio ya que se sienta que es el que tiene el dinero, es el que tiene la sartén por el mango. Hoy en día se recurre a utilizar el gluten en la cocina cuando haces veintes años no se usaba tanto porque se cocina mal, rápido y barato, sumémosle el ejercicio de intolerante al gluten que han aparecido en los últimos años diagnosticados (que por decisión voluntaria son pocos, y aún así reitero el que paga exige)
Así vamos a dejarnos los chistes para el 10 de enero que es cuando empieza el Falla y no estaría de más hacer un articulo en condiciones, de donde comer en Cádiz siendo intolerante al gluten que los de verdadny los de "mentira" te lo van a agradecer y vamos a olvidar ya las cartillas de racionamiento de postguerra, gracias a Dios y pasaron a la historia.
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